El cuerpo es un tema con una natural expresión artística dentro de la literatura, es eje central de un sinfín de libros. Un claro ejemplo de esto es el poemario “Vía Corporis” (2016), de la escritora mexicana Pura López Colomé e ilustrado por el escritor y pintor mexicano Guillermo Arreola.
Este libro se encuentra compuesto por treinta y seis poemas, de los cuales el último no se encuentra titulado. Dicho poemario además de encerrar la temática mencionada con anterioridad, conecta con el mundo espiritual, la nostalgia y el viaje, haciendo de este, un libro completo que relata la travesía del humano con su yo interior.
Este poemario puede catalogarse como una bitácora de recuerdos relacionados a la carne que cubre el alma pues, a lo largo del libro, la poeta evoca memorias cargadas de una fuerte nostalgia del cuerpo y el autoconocimiento que la escritora tiene de este. Es como ver una radiografía que revela lo esencial de lo narrado en las páginas; en pocas palabras, se mantienen latiendo vivencias por las que todos hemos pasado.
Se debe de mencionar que las pinturas realizadas por Guillermo Arreola para este poemario son un claro espejo, en el cual el lector se puede ver reflejado si une esta a las palabras que plasma la autora. Esto ocurre en gran parte, debido al hecho de llevar a un sentido de identificación en el cual se puede encontrar todo lo referido a la carne y al espíritu que irremediablemente ha ido desapareciendo con el paso de los años.
Vía Corporis, además de contener versos en ciertas páginas, carga con un gran peso de fragmentos en los cuales se encuentra aquella historia, a la cual se busca llegar por medio de recursos estilísticos y narrativos, para que el lector entienda la importancia de seguir en la tierra, a pesar de todo lo que sucede, sin desviarse de su centro principal. El cuerpo humano, el cual es una forma de arte hecha de vida, células, ciencia y química, dadora de movimiento y gracia.
Vía Corporis, es un poemario que va más allá del cuerpo, que enfrasca momentos tan reales y crea con ellos una maravilla, llena de sonoridad, visualidad, viajes hacia un mundo distinto al conocido, elementos auditivos y palabras que llegan a un punto catártico que nos hacen desprendernos de toda carne llena de sangre amarga y espíritu corrompido, para conseguir sintonía con el universo y la pureza del cuerpo.
Tu confidente me confesó que lo que te empujó al otro mundo fue un defecto de nacimiento, producto de todos y cada uno de los intríngulis de tu cronometro. A los médicos y cirujanos no les gusta admitir esas cuestiones. Les gusta creer que algo curan, cuando esto en todos los casos, es imposible. La cifra, incluso accidental, circula entre cordón y placenta. En las manitas que parecen orar. En las piernitas que parecen adoptar la posición de loto y meditar. (Lopez: 2016; pp. 115)
Este es un libro altamente recomendable, pues muestra una diferente perspectiva, a todo lo que se ha mencionado durante décadas sobre el cuerpo dentro la literatura. Pareciese que de los pensamientos de Pura López Colomé y de la unión de estos a su pluma, sale una clara y perfecta realidad de lo que es el cuerpo, de lo que somos nosotros. Aunado a esto, lo visual del libro, tiene una notoriedad que compagina muy bien con el mensaje y la visión cosmogónica ofrecida por este. Sin embargo, a la hora de aventurarse a leerlo el lector debe prestar mucho cuidado a lo que su autora escribe, pues aunque parezca simple, lleva consigo significados complejos que hacen de Vía Corporis uno de los mejores libros dentro de la poesía mexicana contemporánea.
Bibliografía:
Lopez Colomé, Pura (2016) Vía Corporis. México: FCE.
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